miércoles, 11 de mayo de 2011

1, 2, 3... bravo.

1. Otra vez una canción se cuela en este mundo de bodycopys, de reuniones, de lavadoras estropeadas y de cañas en que vivo, ciudad enferma mediante. Esta vez la canta E., y lo hace con una ternura infinita, con que no solo estremece sino que consigue hacer callar a un ejército de festivaleros que habían ido a emborracharse sin importar el resultado y oéoé. Por si a alguien le interesa, el resultado fue E. 27 - Manada de desatados 0. Cuantos más seamos más bonito será el silencio, dijo. Y el maldito, ante el asombro de todos, acertó.

2. Y resultó que Murcia rules. Con sus trenes a gasolina y su 14% más de Cruzcampo, su apartamento, su zona VIP, su camarero molón de la zona VIP, con sus conciertos tremendos bajo un sol animal en la Plaza de las flores, con su menda en modo brigada antibostezos, con pulpo y su jamón asado, con su Chinarro, su Vetusta, su Manel. Con sus fotos tremendas de todo eso. Y con sus tipos que de postre te invitan a una botella de champán -como si no hubiéramos bebido suficiente durante la comida. Ese tipo de cosas que matan y dan la vida. A partes iguales. Más o menos. O qué más da.

3. La vuelta a casa. Trazando nuevos -y ambiciosos- planes, escapando como siempre hacia adelante. El próximo concierto, la siguiente isla, otro festival, un partido más. Pongamos que hablo del trillón y medio de cervezas que todavía nos quedan por beber. Birra arriba, birra abajo.

No hay comentarios.: